¿Debería sumarme al Black Friday y aplicar descuentos en mi comercio electrónico? Esta es una de las preguntas que más nos hacen nuestros clientes cuando se acerca esta fecha clave. Y no solo ellos tienen dudas al respecto; de hecho, el 17% de las empresas españolas ha decidido no participar este año en el evento, pese a su popularidad. ¿Por qué? ¿Es realmente beneficioso para todos los comercios electrónicos?
En este artículo vamos a analizar el Informe Black Friday 2024, realizado por Adigital y Confianza Online, para desglosar las tendencias que impactan a los negocios online en esta campaña. Este informe nos ofrece una visión detallada sobre la sostenibilidad, el uso de tecnologías como la inteligencia artificial y los chatbots, así como la importancia de los descuentos y promociones durante este evento comercial.
¿Tiene un impacto positivo para el negocio?
El informe de 2024 revela que tres de cada cuatro empresas de comercio electrónico consideran que Black Friday y Cyber Monday tienen un impacto positivo en su negocio. Este evento les permite no solo incrementar las ventas, sino también aumentar la visibilidad de su marca en un entorno competitivo, especialmente aprovechando la demanda anticipada para las compras navideñas. A través de estos eventos, las tiendas pueden fidelizar clientes, atraer nuevos y promover su responsabilidad corporativa, como sus compromisos medioambientales.
Sin embargo, no todos los comercios comparten esta visión positiva. Un 24% de las empresas encuestadas afirma que estos eventos no aportan valor a largo plazo. Las principales preocupaciones que señalan son el desgaste de la exclusividad del descuento debido a la constante oferta de rebajas durante todo el año, y la presión operativa y logística excesiva que genera. Además, algunos temen que las dificultades logísticas puedan afectar negativamente la experiencia del cliente y la reputación de la marca.
En términos económicos, la participación en Black Friday no genera una proporción significativa de las ventas anuales. El 63% de las empresas asegura que las ventas de Black Friday representan menos del 5% de sus ingresos anuales, mientras que solo un 8% alcanza entre el 10% y el 30%. Este dato refleja una tendencia a la baja en el impacto real de estas campañas, lo que ha llevado a un 17% de las empresas a optar por no participar este año, un incremento del 5% respecto al año anterior.
Además, las previsiones de ventas varían considerablemente: el 42% de las empresas espera mantener los resultados del año pasado, el 33% anticipa un aumento, y el 25% prevé una disminución. Este pesimismo creciente contrasta con el optimismo generalizado de 2023, cuando apenas un 3% de las empresas anticipaba una caída en sus ventas. Esta evolución muestra un cambio en la percepción de la rentabilidad de Black Friday, con más empresas cuestionando la real eficacia de esta estrategia a largo plazo.
¿Cómo van a ser las acciones que apliquen las empresas durante este Black Friday?
El 83% de las empresas que planean realizar promociones en Black Friday y Cyber Monday en 2024 centrarán sus esfuerzos en descuentos en categorías o productos específicos. Esta estrategia se considera más efectiva que los descuentos generales, que fueron predominantes el año pasado. Ofrecer rebajas selectivas permite a los comercios optimizar sus márgenes y gestionar mejor el inventario, además de captar la atención de los consumidores en un mercado saturado de ofertas. Otros métodos de promoción, como envíos gratuitos o descuentos anticipados para clientes, también se están implementando, aunque en menor medida.
Este enfoque más estratégico busca no solo aumentar las ventas a corto plazo, sino también mantener la rentabilidad. La reducción de precios específica permite a las empresas mantenerse competitivas sin comprometer su margen de beneficio general. Además, el hecho de centrarse en ciertos productos o categorías les permite deshacerse de stock acumulado sin tener que realizar rebajas excesivas en toda su oferta.
En comparación con 2023, donde los descuentos generales representaban la mayor parte de las promociones, 2024 marca un cambio hacia un enfoque más dirigido y calculado, alineado con una gestión más eficiente de los recursos y la creación de una sensación de exclusividad que atrae a los consumidores.
Además de optar por descuentos más específicos, otra tendencia clave que se observa en 2024 es la reducción en la duración de las promociones. El 46% de las empresas concentrará sus ofertas únicamente en el fin de semana de Black Friday y Cyber Monday, o incluso solo en esos días. Este acorte de la duración busca reducir la presión logística y de inventario, además de mantener la exclusividad de la oferta.
Por otro lado, la inversión publicitaria también experimenta un recorte. El 75% de las empresas destinará menos del 5% de su presupuesto anual a comunicar las promociones de estos días, lo que refleja una estrategia más comedida y específica.
Finalmente, las ventas fuera de España también se ven limitadas. La mayoría de las empresas encuestadas (46%) no planean realizar ventas internacionales durante el periodo del Black Friday, prefiriendo centrarse exclusivamente en el mercado nacional. Esta tendencia refuerza la necesidad de focalizar los esfuerzos en un mercado local, donde las oportunidades de fidelización y optimización son más claras.
¿Cuál es el objetivo de las empresas durante este Black Friday?
Durante el Black Friday 2024, las empresas de comercio electrónico tienen objetivos diversos. El 28% busca mejorar su facturación, mientras que el 26% se enfoca en atraer nuevos clientes. Un 23% tiene como objetivo fidelizar a los clientes actuales, y el 21% pretende reducir el stock. Esta variedad de metas indica un enfoque más estratégico e integral en la planificación de promociones, a diferencia de 2023, cuando el 64% de las empresas se centraron exclusivamente en aumentar las ventas.
Cambios sociales: la sostenibilidad durante Black Friday
La sostenibilidad ha emergido como un factor determinante en las decisiones de compra de los consumidores digitales españoles, con un 45% dispuesto a pagar más por productos sostenibles y un 60% específicamente por artículos ecológicos. Esta creciente conciencia ambiental, originada en gran medida durante la pandemia, se ve alentada por un marco regulatorio europeo que favorece la doble transición verde y digital.
El comercio electrónico y su crecimiento exponencial en los últimos años no es ajeno a este fenómeno. Durante el evento del Black Friday, las empresas han comenzado a adoptar medidas para reforzar su compromiso con la sostenibilidad y la economía circular. Un 35% de las encuestadas manifiesta que impulsará el uso del embalaje reciclado, biodegradable o reutilizable, buscando minimizar el impacto ambiental asociado al empaquetado y envío de productos. Por otro lado, un 15% optará por optimizar las rutas de entrega para reducir las emisiones de CO2, algo particularmente relevante dado el alto volumen de ventas y entregas asociado a este evento comercial.
En tercer lugar, un 9% de los comercios electrónicos entrevistados se centrará en programas de recuperación y reciclaje de productos, buscando prolongar la vida útil de los artículos y minimizar el desperdicio. Además, un 6% se enfoca en mejorar su sistema de gestión ambiental y llevar a cabo mediciones de huella de carbono, así como en implementar programas de incentivos para facilitar el servicio de reparación o sustitución de productos. Un 3% de las empresas trabajará en plataformas de recommerce o en obtener certificaciones ecológicas para sus productos, reforzando así la transparencia y el compromiso con prácticas más sostenibles.
A pesar de estas acciones, solo un 13% de los comerciantes considera que la sostenibilidad es un factor decisivo en las decisiones de compra de los consumidores durante el Black Friday. Esta mayor conciencia ambiental no siempre se traduce en un aumento directo del interés o la preferencia por productos sostenibles durante este evento comercial, donde priman otros aspectos como la búsqueda de ofertas, el descubrimiento de nuevos productos y el ahorro. Sin embargo, las empresas conscientes de esta tendencia están aprovechando la oportunidad para intensificar sus comunicaciones sobre las prácticas de economía circular, buscando generar mayor sensibilización y educación en torno a la sostenibilidad entre sus clientes.
¿El consumidor sigue creyendo en los descuentos de Black Friday?
La mayoría de las empresas encuestadas (92%) coinciden en que los sistemas de confianza son fundamentales durante eventos como el Black Friday y Cyber Monday. En un periodo de alta competencia, los consumidores priorizan la seguridad y fiabilidad, lo que hace que sellos de calidad, reseñas y recomendaciones sean esenciales. Además, el aumento de transacciones online ha incentivado la necesidad de mejorar la ciberseguridad, con algunas empresas implementando medidas antes del inicio de las ofertas para proteger a los usuarios.
En este contexto, los ecommerce con reputación deben asegurarse de mantener una comunicación fluida y accesible, tanto antes como después de la compra. Las empresas deben informar claramente sobre los plazos de entrega y las políticas de devolución, elementos que son más cruciales que nunca. De hecho, los consumidores valoran tanto la rapidez en los plazos de entrega (preferentemente entre 24 y 72 horas) como la posibilidad de devolver productos sin complicaciones. Las devoluciones, que en Black Friday pueden alcanzar hasta el 50% de las compras, deben gestionarse de forma eficiente para evitar conflictos y preservar la confianza del cliente.
Además, los precios y la disponibilidad de los productos son factores clave. Las empresas deben ser cuidadosas al mostrar precios y asegurarse de no crear falsas expectativas con promociones limitadas o stocks insuficientes.
